Buenos días chic@s,
Hoy os presento
otra tarta especial. Esta vez después de encargarme varias tartas para regalar,
le tocaba a Luisa cumplir años y volvió a confiar en mí para celebrar el día. Esta vez le hice una tarta cuadrada para
que diera para más raciones, la cubrí de lila que es su color preferido y la
base del fondant la pase por un texturizador de lunares para que quedara más
bonito.
Ella es una persona muy alegre y que el encantan los colores por lo que
le di color a la tarta deseándole feliz cumpleaños. Luisa va siempre con su
perro Pitu por la calle, así que no lo podía dejar fuera el día de su
cumpleaños. Con la ayuda de una amiga terminamos la decoración poniendo unas
palabras bastante significativas.
El tema de elegir sabor lo dejo en mis manos.
Lo primero que hice fue probar con un bizcocho de chocolate con leche para
rebajar un poco el sabor a chocolate y he de decir que me gusto mucho el
resultado. Para el relleno probé con un
buttercream de cacao. Estaba bueno pero reconozco que tengo que pulir un poco
la receta porque desde mi punto de vista sabía mucho a azúcar.
¿El problema?
Con el calor de Murcia la tarta empezó a sudar, ya no se deciros si era almíbar
lo que salía o la mantequilla que sudaba un poco peor la cosa es que la tarta
termino en el frigorífico. Le dije que la metiera envuelta en el papel film
para protegerla todo lo posible. A pesar de eso, me dijeron que estaba muy buena
pero que había que comerse un trocito muy pequeño.
Espero que os guste.
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